Oremos por nuestros hermanos y hermanas en misión...
Señor, te ofrezco mi cansancio,
para que ellos tengan fuerzas;
mi desaliento,
para que ellos tengan ánimo,
mi inutilidad,
para que ellos sean eficientes;
.
mis fracasos,
para que ellos triunfen;
mis malestares,
para que ellos estén tranquilos;
.
mi desolación,
para que ellos encuentren consuelo;
mis días oscuros,
para que ellos tengan luz,
mis humillaciones,
para que ellos sean humildes;
.
mi paciencia,
para que ellos sean amables;
mis fallos,
para que ellos sean fieles;
mi silencio,
para que ellos puedan convencer,
.
mis desilusiones,
para que ellos conserven optimismo;
mi soledad,
para que ellos te encuentren.
Tú que eres el gozo,
dales la paz.
Tú que eres la paz,
dales alegría.
Tú que eres la alegría date Tú mismo a ellos...
Amén.